Postítulo en Intervención con Familias, Parejas e Individuos comenzó las clases de la nueva generación 2019

El Postítulo en Intervención con Familias, Parejas e Individuos desde un Modelo Relacional Sistémico, inició las clases de una nueva generación de psicólogos, quienes ahondarán en la propia teoría sistémica y obtendrán valiosas herramientas para aplicar en sus trabajos, en un proceso formativo que contempla un año en aula y de atención a pacientes.

De acuerdo a la Directora del programa, Daniela González, el objetivo de este Postítulo es “entregar herramientas concretas, propias de la teoría sistémica, para poder trabajar en lo que ellos se desempeñan, pero también para poder profundizar en cómo se lleva a cabo la terapia en familia, ver la efectividad de los procesos cuando son familiares, y profundizar e instaurar nuevos conocimientos”.

Respecto de esta generación en particular, la directora añadió que “se reúne un grupo súper diverso, con distintas experiencias, y personas que han trabajado bastante en organizaciones sociales, que tienen un enfoque psicosocial, otros que están iniciándose en la clínica, y yo creo que las expectativas de todos, al menos lo que yo he podido recoger, tiene que ver con poder profundizar en la teoría sistémica y tomar esto como una herramienta para los propios trabajos que ellos desarrollan”.

Daniela Molina, una de las estudiantes de la generación 2019 de este programa, comentó que se desempeña en un espacio clínico, en el que ha trabajado en intervenciones sociales, comunitarias y clínicas. Es por ello que explicó que “vengo en búsqueda de un espacio para reflexionar en conjunto, encontrar nuevas herramientas y aprendizajes, pero también poder practicar y reflexionar junto a la práctica, a las propias formas de ser terapeuta, y cómo vamos enriqueciendo desde las reflexiones conjuntas, desde las nuevas experiencias y conocimientos que podemos compartir. Entonces, yo creo que tiene mucha riqueza en lo práctico, en la teoría y en la posibilidad del trabajo en equipo”.

Asimismo, la psicóloga clínica puntualizó los elementos que la hicieron escoger la Universidad Alberto Hurtado y el Postítulo en Intervención: “De la Universidad Alberto Hurtado siempre he tenido la noción que tiene una tendencia más social, que es algo que a mí me importa mucho, ya que marca mi carrera profesional y es lo que me gusta desde la vocación. El programa me pareció muy interesante esto de que fuera más pequeñito, con mayor interacción entre los profesionales, con una mixtura entre clases y un grupo de supervisión, que lo hace bien interesante de la formación en psicología”.

En tanto, Cristián Iradi, Director de un programa Pie de Corporación Opción y estudiante del programa,  señaló que “vengo acá con la idea de adquirir mayores conocimientos respecto de la intervención familiar principalmente, y llevarla a contextos de programas sociales me parece un desafío y algo necesario en el Chile actual, por lo tanto tengo la idea de poder profundizar en esos conocimientos y adquirir herramientas prácticas también en la sala espejo, que me permitan mejorar como terapeuta y poder dirigir mejor a mi equipo”.

El programa, que finaliza en diciembre de este año, actualmente cuenta con diez estudiantes, los que provienen de diversas áreas de la psicología clínica.

Postítulo en Intervención con Familias, Parejas e Individuos comenzó las clases de la nueva generación 2019

El Postítulo en Intervención con Familias, Parejas e Individuos desde un Modelo Relacional Sistémico, inició las clases de una nueva generación de psicólogos, quienes ahondarán en la propia teoría sistémica y obtendrán valiosas herramientas para aplicar en sus trabajos, en un proceso formativo que contempla un año en aula y de atención a pacientes.

De acuerdo a la Directora del programa, Daniela González, el objetivo de este Postítulo es “entregar herramientas concretas, propias de la teoría sistémica, para poder trabajar en lo que ellos se desempeñan, pero también para poder profundizar en cómo se lleva a cabo la terapia en familia, ver la efectividad de los procesos cuando son familiares, y profundizar e instaurar nuevos conocimientos”.

Respecto de esta generación en particular, la directora añadió que “se reúne un grupo súper diverso, con distintas experiencias, y personas que han trabajado bastante en organizaciones sociales, que tienen un enfoque psicosocial, otros que están iniciándose en la clínica, y yo creo que las expectativas de todos, al menos lo que yo he podido recoger, tiene que ver con poder profundizar en la teoría sistémica y tomar esto como una herramienta para los propios trabajos que ellos desarrollan”.

Daniela Molina, una de las estudiantes de la generación 2019 de este programa, comentó que se desempeña en un espacio clínico, en el que ha trabajado en intervenciones sociales, comunitarias y clínicas. Es por ello que explicó que “vengo en búsqueda de un espacio para reflexionar en conjunto, encontrar nuevas herramientas y aprendizajes, pero también poder practicar y reflexionar junto a la práctica, a las propias formas de ser terapeuta, y cómo vamos enriqueciendo desde las reflexiones conjuntas, desde las nuevas experiencias y conocimientos que podemos compartir. Entonces, yo creo que tiene mucha riqueza en lo práctico, en la teoría y en la posibilidad del trabajo en equipo”.

Asimismo, la psicóloga clínica puntualizó los elementos que la hicieron escoger la Universidad Alberto Hurtado y el Postítulo en Intervención: “De la Universidad Alberto Hurtado siempre he tenido la noción que tiene una tendencia más social, que es algo que a mí me importa mucho, ya que marca mi carrera profesional y es lo que me gusta desde la vocación. El programa me pareció muy interesante esto de que fuera más pequeñito, con mayor interacción entre los profesionales, con una mixtura entre clases y un grupo de supervisión, que lo hace bien interesante de la formación en psicología”.

En tanto, Cristián Iradi, Director de un programa Pie de Corporación Opción y estudiante del programa,  señaló que “vengo acá con la idea de adquirir mayores conocimientos respecto de la intervención familiar principalmente, y llevarla a contextos de programas sociales me parece un desafío y algo necesario en el Chile actual, por lo tanto tengo la idea de poder profundizar en esos conocimientos y adquirir herramientas prácticas también en la sala espejo, que me permitan mejorar como terapeuta y poder dirigir mejor a mi equipo”.

El programa, que finaliza en diciembre de este año, actualmente cuenta con diez estudiantes, los que provienen de diversas áreas de la psicología clínica.