“Uno antes de entrar a la carrera, piensa que la Psicología es estar sentado con un paciente, pero uno no solamente puede preocuparse de una persona, también puede trabajar con un entorno, enseñando, aportando, aprendiendo de la imaginación de un niño y de otros profesionales”. Así relata su trabajo diario Javier Cocio, alumno titulado de la Carrera de Psicología UAH. Cursó los cinco años que dura la carrera de Psicología, repartidos en 10 semestres (revisa aquí la malla curricular), y que permiten egresar con la Licenciatura en Psicología y el Título Profesional de Psicólogo, y salió de la Universidad el 2016.
A las dos semanas encontró trabajo en un colegio en Puente Alto, donde estuvo de reemplazo por unos meses. Antes de que se acabara esa pasajera experiencia laboral, llegó algo definitivo. Postuló a la Fundación Sociedad Educacional Hugo Casanueva, Socedhuca y así llegó a la Escuela de Párvulos CEMAR en Maipú. Javier asegura que la especialidad de Psicología Educacional, le abrió aún más los ojos y lo apasionó por el trabajo multi disciplinario.
“Cuando tomé la especialidad de Psicología Educacional, en el 9° y 10° semestre (quinto año), me di cuenta que había otro mundo. El trabajo es con el área docente, directivos de establecimientos educacionales, se trabaja en gestión, elaborando proyectos, en convivencia, con apoderados, redes externas y otros. Desde mi experiencia, la Psicología Educacional te potencia en otras áreas”, dice Javier.
En sus palabras hay emoción y ganas por cambiar las cosas, algo que según él, aprendió en la Universidad.
“El hecho de que la Universidad quede en el centro de la ciudad, hace que distintas realidades se junten acá. Convergen también distintos pensamientos, estilos de vida, posiciones sociales. Pero todo siempre se trabaja desde el bien común del otro. Desde la Psicología Educacional y la educación en sí misma, es donde uno puede generar cambios en las personas, en los niños, en la sociedad en definitiva”.
Javier entró hace un año a su trabajo estable y pasó otro meses en labores como reemplazante. Casi van dos años desde que no entraba a la Universidad. Hoy, hay mucho que reflexionar.
¿Qué recuerdos tienes de la Alberto Hurtado?
“El enfoque social de la Universidad, siempre lo recuerdo, porque afuera pesa. En mis entrevistas de trabajo, al mencionar el rol social que uno como profesional quiere desempeñar, es bien mirado, es valorado, eso buscan hoy en día. Además, recuerdo y rescato la cercanía de los directivos, los profesores en su conjunto. La comunidad es muy cercana. Compañeros y alumnos de otras carreras están dispuestos a debatir, trabajar en conjunto, a pensar”.
¿Y qué cosas te dejó esa cercanía con otros?
“Las ganas de trabajar, de hacer cosas. Aquí (en la Alberto Hurtado) se potencia mucho el generar herramientas éticas y profesionales para desarrollar soluciones a los problemas de un entorno, de la familia, de los niños, de la escuela”.
Pero en lo práctico, ¿se transforman las cosas con tu trabajo?
“¡Muchísimo! En la Escuela de Párvulos CEMAR trabajo con niños de entre 4 a 6 años, pero también lo hago con los directivos gestionando proyectos, con los apoderados para conocer sus problemas, con las poblaciones para entender y colaborar en el mejoramiento del entorno de los niños… y tú ves participación, te lo agradecen. Incluso ahora estamos trabajando temáticas como violencia intrafamiliar, sexualidad, inclusión y otros. Ahí se nota las ganas que las personas tienen y el aporte que uno puede hacer”.
Aunque la entrevista termina, Javier Cocio sigue contándonos de su trabajo. Le apasiona, pero asegura que es algo que los estudiantes van a vivir solamente en la carrera de Psicología UAH. “Yo he visitado otras Universidades, por actividades, Congresos, Seminarios, por amigos incluso, y el ambiente, la relación de la comunidad y la forma de enseñanza, los objetivos que persiguen, en la Alberto Hurtado, son únicos. Acá está el enfoque social, de verdad”.
Si quieres ingresar a la carrera de Psicología en la Universidad Alberto Hurtado entra a nuestra web de admisión donde puedes consultar más sobre quiénes somos o visitarnos en Almirante Barroso 10, Metro Los Héroes, Santiago. Y no olvides seguirnos en Facebook.
“Uno antes de entrar a la carrera, piensa que la Psicología es estar sentado con un paciente, pero uno no solamente puede preocuparse de una persona, también puede trabajar con un entorno, enseñando, aportando, aprendiendo de la imaginación de un niño y de otros profesionales”. Así relata su trabajo diario Javier Cocio, alumno titulado de la Carrera de Psicología UAH. Cursó los cinco años que dura la carrera de Psicología, repartidos en 10 semestres (revisa aquí la malla curricular), y que permiten egresar con la Licenciatura en Psicología y el Título Profesional de Psicólogo, y salió de la Universidad el 2016.
A las dos semanas encontró trabajo en un colegio en Puente Alto, donde estuvo de reemplazo por unos meses. Antes de que se acabara esa pasajera experiencia laboral, llegó algo definitivo. Postuló a la Fundación Sociedad Educacional Hugo Casanueva, Socedhuca y así llegó a la Escuela de Párvulos CEMAR en Maipú. Javier asegura que la especialidad de Psicología Educacional, le abrió aún más los ojos y lo apasionó por el trabajo multi disciplinario.
“Cuando tomé la especialidad de Psicología Educacional, en el 9° y 10° semestre (quinto año), me di cuenta que había otro mundo. El trabajo es con el área docente, directivos de establecimientos educacionales, se trabaja en gestión, elaborando proyectos, en convivencia, con apoderados, redes externas y otros. Desde mi experiencia, la Psicología Educacional te potencia en otras áreas”, dice Javier.
En sus palabras hay emoción y ganas por cambiar las cosas, algo que según él, aprendió en la Universidad.
“El hecho de que la Universidad quede en el centro de la ciudad, hace que distintas realidades se junten acá. Convergen también distintos pensamientos, estilos de vida, posiciones sociales. Pero todo siempre se trabaja desde el bien común del otro. Desde la Psicología Educacional y la educación en sí misma, es donde uno puede generar cambios en las personas, en los niños, en la sociedad en definitiva”.
Javier entró hace un año a su trabajo estable y pasó otro meses en labores como reemplazante. Casi van dos años desde que no entraba a la Universidad. Hoy, hay mucho que reflexionar.
¿Qué recuerdos tienes de la Alberto Hurtado?
“El enfoque social de la Universidad, siempre lo recuerdo, porque afuera pesa. En mis entrevistas de trabajo, al mencionar el rol social que uno como profesional quiere desempeñar, es bien mirado, es valorado, eso buscan hoy en día. Además, recuerdo y rescato la cercanía de los directivos, los profesores en su conjunto. La comunidad es muy cercana. Compañeros y alumnos de otras carreras están dispuestos a debatir, trabajar en conjunto, a pensar”.
¿Y qué cosas te dejó esa cercanía con otros?
“Las ganas de trabajar, de hacer cosas. Aquí (en la Alberto Hurtado) se potencia mucho el generar herramientas éticas y profesionales para desarrollar soluciones a los problemas de un entorno, de la familia, de los niños, de la escuela”.
Pero en lo práctico, ¿se transforman las cosas con tu trabajo?
“¡Muchísimo! En la Escuela de Párvulos CEMAR trabajo con niños de entre 4 a 6 años, pero también lo hago con los directivos gestionando proyectos, con los apoderados para conocer sus problemas, con las poblaciones para entender y colaborar en el mejoramiento del entorno de los niños… y tú ves participación, te lo agradecen. Incluso ahora estamos trabajando temáticas como violencia intrafamiliar, sexualidad, inclusión y otros. Ahí se nota las ganas que las personas tienen y el aporte que uno puede hacer”.
Aunque la entrevista termina, Javier Cocio sigue contándonos de su trabajo. Le apasiona, pero asegura que es algo que los estudiantes van a vivir solamente en la carrera de Psicología UAH. “Yo he visitado otras Universidades, por actividades, Congresos, Seminarios, por amigos incluso, y el ambiente, la relación de la comunidad y la forma de enseñanza, los objetivos que persiguen, en la Alberto Hurtado, son únicos. Acá está el enfoque social, de verdad”.
Si quieres ingresar a la carrera de Psicología en la Universidad Alberto Hurtado entra a nuestra web de admisión donde puedes consultar más sobre quiénes somos o visitarnos en Almirante Barroso 10, Metro Los Héroes, Santiago. Y no olvides seguirnos en Facebook.